Krusader es una banda Brasilera
de Heavy/Power Metal sobre la que es
difícil realmente descubrir si no hablas portugués, pero con su debut en
largometraje "Angus", el equipo brasileño sirve para recordar que la
música de calidad habla con una voz propia. Es un CD largo que entiendo que se
tardó bastante tiempo en producirse, y aunque no alcanza la marca de agua alta
con cada canción, es una colección de power metal sinfónico robusto, a menudo
llamativo.Para mí, las bandas con 2 vocalistas de tiempo completo son una
especie de remedio, ya que a menudo encuentro que el poder de las canciones se
ve comprometido por la previsibilidad del enfoque que se obtiene al tratar de
darles a ambos cantantes un trato justo. Sin embargo, Krusader adopta un
enfoque diferente y más considerado del estilo, ya que mientras tienen 2
cantantes oficiales, el líder de Skyscraper, Rick Ricci, es sin duda la voz
principal del CD. La voz de Kamila Martin se usa con mucho cuidado, y aunque se
le dan unos momentos en el centro del escenario, su papel es más frecuente para
puntuar las canciones en los momentos más apropiados: si desea una comparación,
la situación es similar a la forma en que funcionó Oratory sus primeros días
antes de que Marco Alves les hiciera un favor a todos y se salieran del camino
de Ana Lara. El equilibrio alcanzado entre los cantantes es indicativo de lo
bien que están arregladas las voces en general; Puede sonar un poco extraño,
pero lo que realmente sobresale del CD es la eficacia con que se utilizan los
coros. Hay más bandas de las que es posible contar que hacen un uso intensivo
de los vocalistas de coros, pero la forma en que Krusader encaja en estos
segmentos en auge en torno a 2 cantantes de tiempo completo y algunas estrellas
invitadas que son de gran peso, es una prueba de su fuerza como músicos. Sé que
comparar bandas brasileñas con Angra es tan perezoso como ... ni siquiera
molestarse en idear una metáfora para ser perezoso ... pero considerando que Krusader
ha logrado encadenar a los vocalistas para que enfrenten el criterio contra el
cual todos los brasileños el power metal se mide, es justo decir que han sido
algo de influencia en ellos. El Kamelot de la era media también es algo que se
recuerda a través de los arreglos orquestales de buen gusto que añaden un toque
especial a las canciones sin tener que atascarlas. Andre Matos aparece al
principio del procedimiento sobre "The First Warrior", mientras que
Edu Falaschi predeciblemente lo supera en "Again", su inimitable
barítono le da un poder considerable a una bestia melódica galopante que podría
ser la mejor canción del CD, incluso sin su ayuda. Si bien hay toques
progresivos aquí y allá, y algunos interludios de baladeros (algunos exitosos,
otros no tanto), es en estos gritos de power metal donde Krusader realmente
encuentra su forma y brinda momentos realmente memorables sobre lo que es. Un
CD fuerte, aunque ligeramente sobrecargado. "Holy metal sign", es
otro en este sentido, y parece llevar el CD a una conclusión natural antes de
que de repente se recupere para otras 4 pistas. La portada de "Bohemian
rhapsody" es una elección tan extraña, y si bien se ejecuta de manera
impecable (tal vez solo querían que su dinero saliera del coro), una de las
canciones más ubicuas en la historia de la música popular de repente. Aparecer
en medio de un CD de power metal sinfónico siempre va a sobresalir una milla.
Sin embargo, después de este paso
lateral confuso, dos canciones sorprendentemente buenas cierran los
procedimientos correctamente. "Ocean to war" es un poco alejado de la
norma, basado en juegos, desfiles y sintiéndose más como el trabajo de un
atuendo de metal épico griego o italiano, agrega un poco de arena a la mezcla.
"The King's Return" proviene de climas más familiares, y después de
su encantadora introducción sinfónica, cobra vida y culmina en un estribillo
que se divide entre ráfagas de falsetes asombrosamente controladas y, por
supuesto, esas voces de coros cautivantes. Mientras que en 16 pistas y 66
minutos de duración es posiblemente un poco recocido, "Angus" es un
formidable debut que ofrece emoción, pasión y variedad. Krusader puede ser una
cantidad desconocida, pero por la fuerza de este CD merecen más que tu
atención.
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